Sagitario Playa

Nice place, clean, and good service. It's good value for the price.

En general la estancia fue cómoda. Fui con mi madre y ella tiene dificultades de movilidad y cognitivos y se nos atendió muy bien. Ana la recepcionista nos ayudó y detalló con desglose todas las dudas que teníamos, la directora muy amable con nosotros en todo momento nos dejó una sombrilla de playa, las habitaciones siempre estaban limpias y bien hechas aunque esperaba un secador de mejor calidad, el hotel no tiene animación y los show nocturnos la verdad dejaban mucho que desear, hubo una noche que Biel el camarero de la noche hizo un bingo muy divertido tengo que destacar su amabilidad acogedora y calurosa bienvenida y estancia con el por que nos ayudó en todo momento con una gran sonrisa y educación. En el restaurante pudimos disfrutar del desayuno y de la cena. El mitre muy servicial y acogedor las camareras también un amor, y hubo una cocinera que hizo un pollo en salsa espectacular. No nos gustó nada que se tuviera que pagar la bebida obligatoria en la cena ya que en el desayuno tienen dispensador de agua y lo apagan en la noche. Un camarero en la noche Gustavo, se acercó en la segunda noche para pedirnos de beber y solo pedimos una botella de agua ya que la noche anterior compramos 2 y nos sobró agua . Y nos respondió de forma grosera e incívica con una respuesta con cito palabras textuales: “ hoy tenemos poca sed por lo que veo” con un tono sarcástico y fuera de lugar, para destacar que efectivamente esa noche no comprábamos una segunda botella obligada. El cocinero de la plancha también se ve cansado y soltó algún comentario fuera de lugar. El spa está bien acondicionado y tienen también servicio de masaje. La chica del spa muy amable y cercana. Había un gatito muy simpático en el hotel que me enamoré de él En resumen: hotel cómodo, tranquilo, con buena comida, buen descanso, buena limpieza, falta animación, personal un poco más correcto a excepciones y pequeños arreglos .

Hotel familiar y tranquilo, muy buen servicio, comida y personal magnífico, tanto el metre del comedor como Biel y Juan del bar nos han hecho sentir como en casa y sobre todo nos han echo el mejor mojito del mundo, volveremos!!!!!